Una adolescente quedó prácticamente sorda y su vida cambiará drásticamente luego de que una bomba casera detonara en un bote de basura del colegio Don Bosco, en la ciudad de Mar del Plata, en Argentina.
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Fueron sus propios compañeros de secundaria quienes instalaron el artefacto siguiendo un reto de Tik Tok. Todavía no se conoce la identidad de los desadaptados que cometieron el delito, pero lo cierto es que los llamados desafíos virales en redes sociales siguen dejando víctimas y siguen captando tontos que se prestan para hacerlos.
Los adolescentes hicieron estallar la bomba cuyo estruendo derribó a la joven identificada como Azul Zabaleta, de 15 años, integrante de la selección de rugby de la institución, quien caminaba cerca del bote cuando se produjo la explosión.
Todo pasó durante uno de los recesos el pasado 8 de julio, pero el caso volvió a removerse esta semana ya que la muchacha no podrá recuperar la audición pese a los esfuerzos de los médicos.
Deberá usar implantes
“El padre de la joven dijo a distintos medios argentinos que tras ser llevada al hospital y quedar internada durante varios días, el primer diagnóstico no fue nada favorable pues se le detectó hipoacusia neurosensorial bilateral severa, debido a que sufrió la pérdida del 96.4% de su audición bilateral y deberá usar un implante coclear en ambos oídos”, citó El Universal.
El padre de la víctima está actuando legalmente contra el colegio ya que cuando ocurrieron los hechos no fueron diligentes en la búsqueda de atención médica. “Confiamos en que las familias puedan continuar el diálogo en el hogar, reflexionando sobre el uso y consumo de las redes sociales, la responsabilidad de los propios actos y las posibles consecuencias que pueden generar en otras personas”, dijo el colegio en un comunicado.
Mientras, la joven vive difíciles momentos tras la explosión, de hecho, desde el pasado 22 de julio no ha vuelto a subir post nuevos en su cuenta en Instagram, que se ha llenado de comentarios dándole ánimos.
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Nada sobre los responsables
La justicia argentina calificó lo sucedido como un hecho doloso, por lo que actuaciones que se iniciaron en la fiscalía de Delitos Culposos derivó a Unidad Funcional de Instrucción que estaba de turno al momento del hecho. Mientras tanto, no se ha informado de la identidad de los responsables de la elaboración, instalación y detonación del artefacto dentro de la institución educativa.
Tampoco se sabe si la bomba estaba dirigida a la joven o si se trató de una casualidad. “Llamamos a la ambulancia, tardó más de lo que queríamos y el papá asumió la responsabilidad de llevarla él mismo hasta la clínica más cercana”, se defendió Mario Caseta, director del Colegio Don Bosco, sobre lo vivido en momentos inmediatos tras el incidente.
Se conoció que los responsables vieron tutoriales en las redes sociales para aprender a hacer la bomba y lamentablemente acaban de causar lesiones gravísimas a una persona inocente, por lo que deberán enfrentar a la justicia.
Se conoció que los implantes cocleares que necesita la adolescente tienen un costo de más de 50.000 dólares, precisó La Nación.
