Por más que se intente de cualquier manera, es inevitable que con el pasar del tiempo y a cierta edad de nuestra vida se debilite y caiga el cabello, no obstante, es importante aclarar que también existen enfermedades, malos hábitos y trastornos que aceleran los tiempos para la inminente situación.
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Antes de la caída final, distintos son los procesos capilares que conllevan al deterioro: pasa de grueso a fino el pelo y pierde volumen, brillo y fuerza. En realidad, si se analiza en detalle la problemática no es de gravedad y es más común de lo que parece, dejando claro que la situación no discrimina ni sexo ni raza.
Motivos
Como ya lo hemos mencionado, son diversos los motivos que adelantan y aceleran el proceso de envejecimiento capilar, pero para conocer un poco más en detalle, nos basamos en los dichos en el medio SaberVivirTv de Teresa Alcalde, directora del Máster en Dermocosmética Farmacéutica de la Universidad de Barcelona, España.
La especialista indica primeramente que las enfermedades sistémicas, los trastornos capilares, el estrés, el tabaco, la mala alimentación y la falta de sueño influyen directamente en el deterioro precoz del cabello. El proceso se define por una debilidad puntual genética a lo que se suma una menor absorción de nutrientes a través del intestino y la falta de microcirculación en la zona de la raíz, no obstante, hay situaciones hormonales y trastornos de ansiedad como la angustia, depresión y estrés que no ayudan a mantener la cabellera sana.
El dermatólogo y especialista en Medicina Capilar, Andreas Finner, agregó en el medio alemán DPA que: “el estrés y la falta de vitaminas también impactan negativamente en la calidad del pelo. En esos casos, incorporar momentos de relax y de alimentación balanceada pueden generar buenos resultados. A nivel alimenticio, los productos que tienen nutrientes beneficiosos para el cabello son las nueces y los alimentos integrales”.
Otros factores
La doctora española otros factores que conllevan al deterioro y envejecimiento capilar. Entre ellos se destacan la genética como la principal razón para la llegada de las canas, trastornos como el hipotiroidismo o el vitíligo que también aumenta la aparición de dichas canas, así también como los procesos del estrés y el consumo desmedido del tabaco. Para combatir la problemática, es fundamental un consumo adecuado y supervisado de biotina, zinc y vitaminas D.