A veces tienes la ansiedad imperiosa de picotear algo, pero no tienes “hambre real” sino, simplemente, ganas de comer.
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En el contenido de la revista española Saber Vivir, especialistas aconsejan que cuando tengas intención de picotear, distrae tu mente por diez minutos. Es el tiempo que tarda en disiparse este tipo de hambre que responde a factores como:
- El aburrimiento, la sed o simplemente las ganas puntuales de masticar algo consistente a veces se confunde con el hambre. Pero estas sensaciones se desvanecen en pocos minutos.
- Un pico de estrés. La ansiedad y los nervios actúan en el cerebro la señal de peligro. Cuando esto ocurre el organismo te pide una dosis de glucosa extra por si necesitas actuar contra algo a alguien.
Ahora bien, ¿Por qué nuestro cuerpo pide azúcar?
El especialista en obesidad y metabolismo, Frank Suárez, explica en su blog que “toda persona que ha tenido problemas con su metabolismo, con la obesidad, con la falta de energía y demás; en un momento u otro ha estado su cuerpo pidiéndole azúcar. El azúcar es una sustancia que da mucha satisfacción, da mucha estimulación”.
“He descubierto que el cuerpo está pidiendo azúcar es porque antes de pedir esa azúcar tenía un problema de falta de energía; o sea la razón por la cual el cuerpo pidió el azúcar y te hizo atraerte a ella y cuando tú la consumiste quedaste atrapado ahora del vicio del chocolate, del azúcar, de lo que sea; es porque antes de eso lo que lo ocasionó fue la falta de energía”, señala el experto.
Entonces… ¿Qué podemos hacer para no consumir azúcar ante la falta de energía?
- Resolver la hidratación.
Un cuerpo que no consume suficiente agua no va a poder producir suficiente energía y te va a pedir azúcar. Así que lo primero que hay que mirar es la hidratación, poner ese efecto dentro.
- Magnesio y potasio
Lo segundo es saber que, para poder crear energía en el cuerpo, hace falta magnesio y potasio.
Así que muchas personas que tienen adicción al azúcar, lo que realmente está pasando es que están deshidratados y les falta magnesio y potasio.