Una relación, ya sea de amistad, familiar o de pareja, siempre puede tonarse tóxica cuando hay rasgos de manipulación. Lo ideal es que cada persona se siente libre de actuar y decir lo que desee, pero pueden existir personas alrededor que intente manipular o controlar desde las acciones hasta los pensamientos.
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“La manipulación psicológica es una herramienta predominante utilizada por personas con tendencias narcisistas. Su poder radica en la facilidad con la que puede pasar desapercibida y, al mismo tiempo, ser un método de control devastador. La clave para superar este tipo de abuso comienza con comprender cómo se manifiesta en las relaciones diarias e interacciones interpersonales”, manifestó el especialista Jamie Cannon a Psychology Today.
No caigas en la manipulación psicológica
Para evitar caer en este tipo de manipulaciones y de relaciones tóxicas, este especialista habló sobre las tácticas más frecuentes que utilizan las personas al momento de manipular psicológicamente a los demás.
Toman ventaja de las relaciones íntimas o cercanas
“Los manipuladores se encargan de conocer todo sobre las debilidades de las personas, sus preocupaciones y su historia personal”, refiere el psicólogo, usando esta información para manipular al otro desde la vulnerabilidad.
Proyectar la culpa
Una conducta muy común en los manipuladores es cuando adoptan una actitud muy rigurosa, enfocados en analizar cómo han sido “atacados” por la víctima.
Violar límites
La base de cualquier tipo de relación se basa en respetar los límites de cada quien, pero un manipulador psicológico irá probando los límites de los demás, violándolos poco a poco.
Gaslighting
Se trata de decir mentiras flagrantes o contrarrestar la memoria de eventos de la víctima.
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