¿Te ha sucedido? ¿Has sentido esos deseos incontrolables por ir a la nevera o abrir la despensa en busca de un alimento fuera de las horas de comidas regulares? No te preocupes, es algo que, a todos, aunque sea en algún momento de nuestras vidas, nos ha ocurrido.
PUBLICIDAD
Pero esta situación tiene diversas causas que a continuación explicaremos con el propósito de que tengas la información necesaria y, por ende, las herramientas para evitar comer exceso.
Causas del hambre frecuente
De acuerdo al sitio web Semana, estos pueden ser los factores que generen el apetito constante.
- Los alimentos que consumes no son de calidad: no estás ingiriendo suficiente energía y nutrientes en las comidas que haces a lo largo del día.
- Confundes la sed con el hambre: “El hipotálamo (la parte del diencéfalo y el más importante centro de control del sistema nervioso) regula tanto la sensación de hambre como la de sed. Cuando se está deshidratado, el hipotálamo puede mandar señales confusas”, destaca la aplicación Runtastic.
- Tus redes sociales están llenas de imágenes de alimentos provocativos: esto ocasiona que tu mente no deje de pensar en comer a todo momento esos alimentos que viste, por ejemplo, en el Instagram, o lo que tengas en ese momento en la nevera.
“Hay pruebas científicas que sólo ver comida hace desarrollar la sensación de hambre. Estas imágenes incrementan los niveles de grelina, la hormona del hambre”.
— Página Runtastic
- Duermes poco, no las recomendadas 8 horas: en esas horas de desvelo, tal vez por las preocupaciones, tiendes a buscar snacks o meriendas para saciar la ansiedad.
- Te sientes triste o, incluso deprimido: lo que sientes no es hambre, es una “hambre emocional” que busca encontrar en alimentos llenos de azúcares y carbohidratos mitigar la pesadumbre del corazón y la mente.