Un rico café en la mañana es sin duda uno de los mejores placeres que se puede dar el ser humano, sobre todo si se arranca la jornada con bastante sueño. Al ser unas de las bebidas más injeridas en el mundo, distintas son las modalidades para poder tomar café.
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Entre las que están más de moda en estos tiempos se encuentran las cápsulas de café, adaptada a la era tecnológica en que vivimos en la actualidad, pero que no se puede ocultar distintos son los análisis y estudios que determinan que guarda cierta relación con algunos problemas vinculados a su consumo, como la presencia de ciertos compuestos químicos potencialmente perjudiciales para la salud y también su dificultad para ser recicladas.
Beneficios del café por día
Según información de la EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, lo recomendable es un consumo máximo de unos dos a cinco cafés al día. Este es el contenido estimado asociado a 400 mg. de cafeína como la cantidad máxima que puede consumir la población adulta sana sin presentar problemas para la salud.
Café en cápsulas
Una cápsula de café contiene entre 55-65 mg. de cafeína, pudiendo aumentar hasta los 90 mg. en algunas variedades especiales de cápsula. Un estudio publicado en la revista Nutrition and Health analizó el contenido de cafeína de diferentes cápsulas. Sorpresivamente, los investigadores hallaron que el volumen de cafeína en las diferentes cápsulas variaba notablemente respecto a la indicación en el envase: no se correspondía con lo que decía la etiqueta.
Furano
Algunos elementos químicos generan cierta preocupación respecto al café en cápsulas, como, por ejemplo, los furanos, y también el aluminio con el que se elaboran sus envases.
Un estudio de la Universidad de Barcelona mostró que el café en cápsulas aportaba las concentraciones más altas de furano en comparación con otras preparaciones tradicionales del café. “Para tranquilidad de todos, las cantidades mostradas se encontraban por debajo del límite de furano considerado como seguro. Lo cual no significa que debamos relajarnos”, señala Mario Sánchez, Tecnólogo Alimentario, especialista en Nutrición y Seguridad Alimentaria en España.
El café contenido dentro de las cápsulas para máquina es café auténtico, sin embargo, las cápsulas en sí son muy contaminantes, a menos de que se traten de cápsulas reutilizables.
