Aunque a veces hacemos actividades y procuramos comer ciertas comidas para ayudar a nuestra memoria y a evitar que nuestro cerebro se deteriore, hay algunos hábitos que desconocemos que en realidad lo perjudican.
Aquí te contamos los detalles de qué debes evitar hacer con mucha frecuencia para ayudar a tu cerebro a evitar el deterioro y mantenerlo estable y saludable:
1. Mala alimentación
Expertos sugieren que llevar una dieta que no sea equilibrada y que sea rica en alimentos malos para el cerebro, puede acelerar el deterioro cognitivo.
Por el contrario, “estudios existentes apuntan a la idea de que podemos reducir la posibilidad de demencia al evitar los alimentos que comprometen a nuestras bacterias intestinales y debilitan nuestra memoria”, explica Uma Naidoo, psiquiatra nutricional de Harvard.
Seguir una dieta mediterránea, como verduras de hojas verdes, huevos, aguacate, pescado azul, yogurt, frutos secos, té, carne roja y frutas como los arándanos, es una buena opción para el cerebro y la memoria.
2. Sedentarismo
Algunos estudios sugieren que el sedentarismo podría acelerar el deterioro de la memoria asociado a la edad y aumentar el riesgo de demencia y Alzheimer. El sitio especializado ‘La mente es maravillosa’ señala que “se plantea que un 13 % de los casos de Alzheimer a nivel mundial podría atribuirse al sedentarismo”.
3. Soledad
Diversos estudios han encontrado correlaciones entre la soledad y una disminución de la memoria y una función cognitiva más deficiente en general. La Fundación Pasqual Maragall, dedicada a la investigación científica del Alzheimer, indica que “relacionarse con otras personas nos ayuda a mantener las conexiones neuronales activas y resulta clave para nuestro bienestar”.
4. Estrés
Los expertos de Clínica Mayo nos dicen que: “El estrés, la ansiedad o la depresión pueden causar olvidos, confusión, dificultad para concentrarse y otros problemas que interrumpen las actividades diarias”.
5. Tabaquismo
Un estudio realizado por el Instituto de Investigación Genómica Traslacional de Arizona sobre 70.000 personas determinó que fumar daña el aprendizaje verbal y la memoria de manera significativa, sobre todo en las mujeres (quienes también son más propensas al Alzheimer).
6. No controlar diabetes, hipertensión, colesterol
De acuerdo con expertos, no controlar los factores de riesgo cardiovascular, la diabetes, hipertensión, colesterol o la obesidad, pueden afectar la memoria. Un estudio publicado en la revista Neurology, nos dice que: “Las personas con diabetes tipo 2 tienen problemas de regulación del flujo sanguíneo. Nuestros resultados sugieren que la diabetes y el azúcar en la sangre imponen un efecto negativo crónico en las habilidades cognitivas y de toma de decisiones”.
7. No retar a la mente
Es importante estimular al cerebro constantemente, como cualquier otro músculo. Para evitar el Alzheimer, la Fundación Pasqual Maragall dice: “Ofrecer retos a la mente ayuda a mantener nuestra reserva cognitiva, aprender nuevas habilidades, hacer crucigramas, leer, apuntarse a talleres o curso”.
8. No dormir lo suficiente
Muchas veces se ha mencionado lo necesario que es el sueño para la salud de la materia gris, y esto afecta, naturalmente, a nuestra memoria. Investigadores del Laboratorio de Neurociencia Funcional de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) mostraron que reducir a la mitad el tiempo de sueño nocturno (sólo 4 horas) afecta la formación de nuevas memorias al día siguiente.
9. Alcoholismo
Se han realizado innumerables investigaciones que arrojan que el alcohol tiene efectos negativos en el cerebro, como por ejemplo, reducir el volumen cerebral, y también afecta la memoria. La experta de Harvard advierte sobre el alcohol y la memoria: “Si bien beber puede hacer que se relajen en el momento, lo pagan a la mañana siguiente, cuando se despiertan nerviosos con niebla mental”.