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Daddy Yankee presenta demanda contra su ex esposa Mireddys González por un monto de $250 millones de dólares

La demanda también indica que Mireddys González autorizó a Raphy Pina a pagarse a sí mismo y a recibir comisiones por el recorrido efectuado mientras

El famoso artista urbano Ramón Luis Ayala Rodríguez, más reconocido como Daddy Yankee, ha interpuesto una demanda en contra de su antigua esposa Mireddys González Castellanos y la hermana de ella, Ayeicha González Castellanos.

En esta demanda, él artista solicita la suma de $250 millones debido a una serie de supuestas irregularidades que, según él, ocurrieron mientras ellas tenían el control absoluto de las compañías El Cartel Récords y Los Cangris.

¿Cuáles son los detalles de la demanda?

En la demanda, el equipo legal de Daddy Yankee, bajo la dirección del abogado Carlos Díaz Olivo, indica que las hermanas González Castellanos llevaron a cabo numerosas acciones.

A pesar de no ser mencionado como parte de la demanda, se hace referencia al exrepresentante Rafael “Raphy” Pina Nieves debido a diversas decisiones que fueron aprobadas por la ahora exesposa del músico.

“Esta jornada se interpuso una acción legal en el Tribunal de Carolina, en la cual se tuvo que alegar que mientras ejercían un control absoluto sobre las empresas, las finanzas e incluso los ingresos obtenidos por el esfuerzo y habilidad del Sr. Ramón Ayala, las hermanas Mireddys y Ayeicha González, incumplieron sus obligaciones fiduciarias y causaron graves perjuicios”, según lo expresado por los representantes legales de Daddy Yankee.

De acuerdo con el documento legal, las acusadas “ocultaron información, destruyeron evidencia, desperdiciaron recursos y no cumplieron con obligaciones tributarias existentes, además de otras violaciones fiduciarias y actos señalados”.

Asimismo, se acusa a las hermanas González Castellanos de no satisfacer las responsabilidades empresariales ante el Departamento de Hacienda, ni implementar un sistema de administración y contabilidad “ordenado y confiable”. También se les critica por no llevar un registro adecuado de los ingresos obtenidos por el artista, incluyendo los provenientes de la gira de conciertos más reciente.

Además, se informa que estas no cobraron miles de dólares en cheques que expiraron, ocultaron documentos durante cuatro años y también se afirma que las demandadas eliminaron correos electrónicos de comunicaciones importantes.

“El recurso legal presentado ante el Tribunal detalla cómo estas personas actuaron en su propio beneficio y el de otros, violando la ley y los intereses de un individuo que, además de ser un artista, era un miembro de su familia. La demanda interpuesta hoy no tiene relación con el proceso de liquidación de bienes gananciales, sobre el cual el Sr. Ramón Ayala ha sido consistente y enfático en que se realice de manera justa y conforme a las leyes de Puerto Rico, para garantizar a su exesposa lo que legalmente le corresponde”, señalaron los abogados de Daddy Yankee.

La denuncia afirma que, el 12 de diciembre de 2024, las acusadas efectuaron transferencias de $20 millones desde la cuenta de Los Cangris y $80 millones desde la cuenta de El Cartel Récords, a pesar de que la corte les había advertido que no tenían autorización para actuar en representación de las corporaciones.

En la sección 43 del documento se le imputa a González que “extrae recursos corporativos con el único propósito de beneficiarse personalmente, sin preocuparse por las repercusiones negativas para la empresa y para el demandante”.

En el apartado 80 del texto, se menciona que las hermanas González concedieron permiso al productor Raphy Pina y a sus compañías Mr. Soldout y World Music Latin para autoatribuirse un pago de aproximadamente $27 millones por costos generados. Sin embargo, “sin que exista evidencia verificable, análisis contable, ni auditoria que acredite fehacientemente, que en efecto, se debía esa cifra millonaria por los gastos supuestamente incurridos” en la serie de conciertos “Última Vuelta” del artista urbano.

De manera similar, la demanda indica que las hermanas permitieron a las compañías de Pina percibir una comisión del 30% de las ganancias de la gira, a pesar de que él no estuvo presente en ella debido a que se encontraba en prisión.

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