Kate Middleton ha sido durante años un referente de estilo en la realeza británica. Cada una de sus apariciones públicas genera interés no solo por su presencia, sino también por sus elegantes elecciones de vestuario. Sin embargo, la princesa de Gales ha tomado una decisión importante que ha sorprendido a sus seguidores.
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El Palacio de Kensington ya no compartirá detalles sobre sus atuendos en sus compromisos oficiales. De acuerdo con el Sunday Times, esta decisión proviene directamente de Kate, quien quiere que la atención se centre en temas de mayor relevancia, como su trabajo de caridad y sus iniciativas filantrópicas.
Kate Middleton quiere que su apariencia no le reste importancia a su trabajo humanitario
Una fuente cercana explicó que la princesa considera que su imagen no debería eclipsar las causas que apoya. “Existe una sensación absoluta de que el trabajo público no se trata de lo que viste la princesa”, declaró la fuente. “Ella quiere que el foco esté en los temas realmente importantes, en las personas y en las causas que destaca”.
Aunque el Palacio de Kensington aún podría revelar detalles sobre su vestuario en eventos de gran relevancia, como galas o actos oficiales de la realeza, esta práctica ya no se aplicará a compromisos más rutinarios. A lo largo de los años, Middleton ha sabido utilizar la moda como una herramienta de comunicación.
Kate Middleton recientemente anunció que su cáncer está en remisión, pero ha sido clara en que su recuperación es un proceso. Durante su reciente tratamiento contra el cáncer, sus elecciones de vestuario no solo mantuvieron su característico refinamiento, sino que también ayudaron a desviar la atención de su estado de salud.
Kate Middleton, un icono de la moda con gran corazón
En el Trooping the Colour de junio de 2024, su primera gran aparición tras anunciar su enfermedad, optó por un vestido bicolor de Jenny Packham con una lazada en el hombro, un detalle que, según algunos expertos en moda, podría haber servido para disimular el catéter utilizado en su tratamiento de quimioterapia.
Un mes después, en la final de Wimbledon, Kate eligió un vestido de Safiyaa en tono lavanda con cuello cerrado, un diseño que originalmente tenía un escote en V y que habría sido modificado con el mismo propósito. Por ahora, su regreso a la agenda oficial será medido, priorizando su bienestar y el de su familia.