El espectáculo de medio tiempo del Super Bowl ha sido durante años un evento esperado tanto por fanáticos del fútbol como de la música. Sin embargo, la calidad y la relevancia de los artistas que se presentan han sido objeto de críticas, especialmente después del poco memorable show de Maroon 5 en el Super Bowl de 2019, en una ciudad como Atlanta, conocida por su vibrante escena hip-hop. Fue entonces cuando la NFL, buscando revitalizar el evento y darle un giro más inclusivo, se acercó a Jay-Z y su empresa Roc Nation para que tomara el control de la producción musical del Super Bowl.

Desde 2020, Roc Nation ha trabajado junto con la NFL para garantizar que el espectáculo de medio tiempo refleje mejor la diversidad musical de los Estados Unidos. De esta manera, no solo se ha dado espacio a artistas afroamericanos y latinos, sino que también se ha buscado que el evento se alinee con el pulso de los tiempos y las demandas culturales.

Para entender cómo Roc Nation ha logrado este cambio, Desiree Pérez, directora ejecutiva de la empresa, compartió detalles de su proceso creativo y la influencia de Jay-Z en la selección de artistas, al sitio Nola.com.

La influencia de Jay-Z y la búsqueda de diversidad musical

Después del fracaso de Maroon 5 en 2019, cuando el espectáculo de medio tiempo no logró conectar con la audiencia en una ciudad tan profundamente ligada al hip-hop, la NFL decidió dar un paso atrás y confiar en expertos para la organización y producción del show.

Según Pérez, fue el propietario de los New England Patriots, Robert Kraft, quien se acercó a Jay-Z con una propuesta clara: “Necesitamos que vengan expertos para organizar y producir el espectáculo del medio tiempo, y no debería ser la NFL”. La idea era no solo mejorar la calidad del show, sino también hacerlo más representativo de la diversidad cultural estadounidense.

Desde entonces, el espectáculo de medio tiempo ha incluido artistas latinos y afroamericanos, reflejando una mayor inclusión en un evento que tradicionalmente había sido dominado por géneros más comerciales. “Los géneros musicales han evolucionado de tal manera que el hip-hop es amado por blancos, negros y todas las razas.

Esa es la idea: unir generaciones”, explicó Pérez. El hecho de que Roc Nation haya llevado a artistas como Shakira, Jennifer López, Dr. Dre, Snoop Dogg y Kendrick Lamar a los escenarios demuestra un compromiso con esta visión inclusiva. Este año, incluso se rumora que Lil Wayne podría ser considerado para el próximo espectáculo, y SZA se presentaría como invitada especial, en una propuesta impulsada por Kendrick Lamar.

La visión de Roc Nation: más que un artista de éxito

El proceso de selección de artistas para el Super Bowl no es tan sencillo como elegir al artista más popular del momento. Pérez explicó que el enfoque de Roc Nation se basa en pensar más allá de los éxitos comerciales: “Se trata de cuándo, por qué y quién. ¿Cuál es el tema? ¿Cuál es el pulso de los tiempos, de hacia dónde nos dirigimos, de lo que la gente está escuchando? Tenemos todo eso en cuenta”.

Es por eso que, incluso con el éxito continuo de Kendrick Lamar, la elección de un artista como él no es casualidad, ya que sus letras a menudo incluyen temas políticos y sociales que podrían generar controversia.

Sin embargo, Roc Nation no se deja intimidar por estos riesgos. En palabras de Pérez, “es parte de la consideración” para el espectáculo de medio tiempo. Lamar, quien acaba de recibir un reconocimiento a su carrera con un Grammy y el prestigioso premio Pulitzer, es visto como una figura que, más allá de sus letras provocadoras, representa el tipo de impacto cultural que Roc Nation quiere traer al Super Bowl.