Bad Bunny empezó el 2025 con todo. El cantante puertorriqueño acaba de anunciar, como se esperaba, que llevará la promoción de su nuevo álbum ‘Debi tirar más fotos’ a los escenarios. Sin embargo, la sorpresa si llegó pues se trata de una residencia histórica, con 21 conciertos en el Coliseo José Miguel Agrelot de Puerto Rico, conocido popularmente como ‘El Choli’ o ‘El Choliseo’.
“Ahora estoy en Puerto Rico, estoy en casa, la estoy pasando bien, y si les soy honesto, no me quiero ir de aquí”, señaló el artista boricua que ha hecho de este último álbum un homenaje a su isla natal y ha logrado un éxito mundial inmediato fusionando reguetón con salsa y plena.
¿Qué se sabe de esta residencia de Bad Bunny en el Coliseo de Puerto Rico?
Los espectáculos comenzarán en julio bajo el título ‘No me quiero ir de aquí’. Producidos por Noah Assad Presents / Move Concerts, los conciertos arrancan el 11 de julio y se llevarán a cabo todos los fines de semana, de viernes a domingo.
En línea con el emotivo homenaje a su isla que supone el disco, las primeras nueve funciones serán exclusivamente para residentes de Puerto Rico.
El artista urbano marca así un récord de conciertos consecutivos en la principal sala de espectáculos de Puerto Rico, superando las 14 funciones del dúo de reguetón Wisin y Yandel.
Los boletos para estos conciertos saldrán a la venta el miércoles, 15 de enero, y solo estarán disponibles para comprar en persona en varios locales de la isla.
‘Benito’ no desestimó, sin embargo, a otros países, ya que prometió que “antes de que se acabe el año” publicará las fechas de una gira a países que son sus favoritos y otros a los que nunca ha ido o no ha visitado en años.
Compuesto por 17 canciones, el sexto álbum de estudio de Bad Bunny cuenta con las colaboraciones de Rainao en el tema Perfumito nuevo; Chuwi en Weltita; Dei V y Omar Courtz en Veldá, y Pleneros de la Cresta en Café con ron. Otras de las canciones del disco son Nuevayol, Voy a llevarte pa’ PR, Baile inolvidable, El clúb, Pitorro de coco y Lo que le pasó a Hawái.
Los temas que se abordan en el disco son problemas que sufre Puerto Rico como la migración a Estados Unidos y la gentrificación, y ponen en valor ritmos musicales típicos de la isla como la salsa y la plena.