Warner Bros. Discovery (WBD) ha anunciado una importante reestructuración que separará su división de televisión por cable de sus operaciones de streaming y estudios.
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Este movimiento, que sigue una tendencia similar adoptada por Comcast/NBC Universal, permitirá a WBD gestionar de manera independiente sus redes de cable como CNN, TNT, TBS y Discovery Channel.
Según The Hollywood Reporter, esta reorganización busca preparar el terreno para posibles ajustes estratégicos, como desprenderse de algunos canales y reducir su considerable deuda.
Enfoque en flujos de efectivo
El presidente y CEO de WBD, David Zaslav, destacó que esta transformación empresarial posiciona mejor a la compañía en un panorama mediático cambiante.
“Nuestro objetivo es mantener nuestras redes globales de televisión lineal como generadoras de flujo de efectivo, mientras nuestras divisiones de streaming y estudios impulsan el crecimiento mediante historias cautivadoras”, explicó Zaslav.
La nueva estructura permitirá a WBD explorar estrategias futuras que puedan maximizar el valor para los accionistas.
Retos y ventajas para WBD
A diferencia de Comcast, que eliminó algunos de sus canales lineales, WBD mantendrá su nueva división de redes de televisión bajo el paraguas corporativo, al menos hasta mediados de 2025.
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Esta decisión responde a la necesidad de flujo de efectivo que las redes lineales generan para ayudar a amortizar la deuda adquirida durante la formación de WBD. No obstante, la reestructuración también posiciona a la compañía para posibles alianzas estratégicas, con socios como Paramount Global o Comcast siendo los candidatos más probables para futuras fusiones o adquisiciones.
Impacto en la industria
Según mencionan usuarios en redes sociales, si bien esta estrategia apunta a estabilizar las finanzas de la empresa y adaptarse a un mercado en evolución, también subraya la presión sobre la televisión por cable como formato.
Se hable sobre que, aunque los cambios buscan optimizar la rentabilidad, el impacto sobre los consumidores tradicionales de televisión lineal podría ser significativo, generando preocupación entre quienes aún prefieren este formato sobre el streaming.