La histórica catedral de Notre Dame en París, uno de los íconos más representativos de Francia, abrió nuevamente sus puertas al público el 7 de diciembre de 2024, tras un arduo proceso de reconstrucción que duró cinco años.
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El renovado esplendor de este monumento gótico, destruido en parte por un devastador incendio en 2019, fue posible gracias a una serie de generosas donaciones, entre las que destaca la de François-Henri Pinault, esposo de la actriz mexicana Salma Hayek.
La donación del esposo de Salma Hayek
La familia Pinault, a través de su empresa de lujo Kering, realizó una donación de 113 millones de dólares para apoyar la restauración de la catedral. Este gesto solidario se ha convertido en un símbolo de compromiso y generosidad, subrayando la importancia de preservar el patrimonio cultural y religioso. Kering, que alberga marcas de renombre como Gucci, Yves Saint Laurent y Balenciaga, también reafirmó su compromiso con la cultura y las artes.
Así fue la reapertura de Notre Dame
El evento de reapertura de Notre Dame fue una ocasión histórica que reunió a 1,500 invitados de todo el mundo, incluidos líderes políticos y figuras de renombre. Entre los asistentes se encontraban François-Henri Pinault y Salma Hayek, quienes fueron recibidos con gran entusiasmo. Otros invitados destacados incluyeron a Elon Musk, el príncipe William, Jill Biden (esposa del presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden), y el presidente electo Donald Trump, además del presidente francés Emmanuel Macron, quien presidió la ceremonia.
Salma Hayek fue invitada a la reapertura
La actriz mexicana, siempre impecable en su estilo, acompañó a su esposo en la ceremonia luciendo un elegante abrigo afelpado verde oliva, un vestido negro y un impresionante collar de diamantes. Su look se completó con un moño alto armado, que aportó sofisticación y glamour al evento, destacando su presencia con su habitual elegancia.
En sus redes sociales, Hayek expresó la emoción que sentía por ser parte de este momento histórico. “Me siento honrada y asombrada por la reapertura de Notre-Dame, un verdadero momento en la historia y un símbolo de resiliencia y esperanza”, compartió la actriz en su cuenta de Instagram, con una foto que capturaba la magnificencia de la catedral restaurada.
Salma Hayek no dudó en expresar su orgullo por su esposo y su familia. “Hoy más que nunca me siento orgullosa de ser parte de la familia Pinault. No solo por su participación personal y sentida en la reconstrucción de Notre-Dame de París, sino porque su contribución no le reportará ninguna deducción fiscal al gobierno”, dijo la actriz, resaltando la nobleza de la donación y su impacto positivo en la preservación de un patrimonio cultural invaluable.
