En un emocionante suceso que ha sacudido las plataformas de streaming, la pelea entre Jake Paul y Mike Tyson en Netflix se ha convertido en un fenómeno sin precedentes.
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Este evento ha logrado un éxito fenomenal al alcanzar la asombrosa cifra de 46.6 millones de vistas hasta el cierre del domingo, consolidándose como el programa más visto de la semana en la plataforma.
A pesar de enfrentar algunos problemas técnicos durante la transmisión, la pelea se situó en el primer puesto en 78 países y en el Top 10 en los 91 países donde Netflix realiza seguimiento.
Audiencia masiva
Datos proporcionados por TVision revelan que la pelea entre Paul y Tyson logró una audiencia promedio de 108 millones de espectadores en vivo desde el inicio hasta el final del evento.
Esta cifra se incrementó aún más, alcanzando los 125 millones de espectadores para el día domingo. TVision emplea una red de 5,000 dispositivos de TV conectados para recopilar y analizar estos impresionantes datos de audiencia.
La medición precisa de la audiencia total en la era del streaming puede resultar un desafío considerable, y Netflix rara vez revela estos números de manera explícita, lo que dificulta las comparaciones con otros eventos o programas.
A pesar de esta complejidad, el impacto y la popularidad de la pelea entre Jake y Tyson en esta plataforma son innegables según muchos fanáticos, consolidando este evento como un hito en la historia de la plataforma de streaming.
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Impacto cultural
Según seguidores y usuarios de redes sociales, esta victoria en términos de audiencia deja en claro el poder de atracción que eventos de esta naturaleza tienen sobre el público, demostrando que la combinación de figuras reconocidas y un formato novedoso puede resultar en un éxito sin precedentes en el mundo digital.
Se mencionó que la pelea no solo fue un espectáculo deportivo, sino que se convirtió en un fenómeno cultural que capturó la atención de millones de espectadores en todo el mundo.