El director Adam McKay, famoso por sus películas The Big Short y Don’t Look Up, expresó su intención de distanciarse del Partido Demócrata en medio de la reciente contienda electoral en Estados Unidos.
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A medida que Donald Trump se acercaba a una posible victoria, McKay anunció en la red social X que planea cambiar su afiliación, considerando el Partido Verde o Working Families como alternativas. Esta decisión marca un giro en la postura política de McKay, quien anteriormente apoyaba a los demócratas.
McKay ha mostrado su respaldo a figuras progresistas como Bernie Sanders, a quien apoyó en las elecciones de 2016 y 2020. En 2019, el director se unió a los Socialistas Democráticos de América, reforzando su compromiso con políticas de izquierda.
Recientemente, firmó una carta dirigida al presidente Biden para exigir un alto al fuego en Gaza, reflejando su creciente desacuerdo con las decisiones de la administración actual en temas de política exterior y derechos humanos.
Durante la noche de los comicios, Adam expresó su descontento con la estrategia del Partido Demócrata, criticando aspectos como la falta de transparencia sobre la salud de Biden y el respaldo a políticas controvertidas como el fracking.
Para Adam, estas decisiones, sumadas a la falta de avances en temas como el sistema de salud pública, muestran a un partido más preocupado por la imagen que por la efectividad de sus políticas. “¿No era la inteligencia el fuerte de los liberales?”, cuestionó, poniendo en duda la autenticidad de los valores del partido.
Desilusión con la imagen pública
El director también mostró su frustración con lo que describió como “un desfile de ópticas inestables envueltas en tipografías de The New York Times”, en referencia a las estrategias mediáticas que, según él, priorizan la apariencia sobre el contenido.
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En sus mensajes, McKay anticipó que el Partido Demócrata, tras el resultado electoral, buscaría culpar a Rusia o a terceros candidatos en vez de aceptar sus propios errores.
Mientras Donald aseguraba su victoria en Pensilvania y consolidaba su liderazgo, McKay concluyó que era momento de cuestionar a los líderes del Partido Demócrata. Con su mensaje, el director hizo un llamado a la introspección y al cambio, sugiriendo que es tiempo de reconsiderar la dirección política y las prioridades del partido en beneficio del país.