Nicole Kidman ha sorprendido a sus seguidores al revelar detalles sobre el rodaje de su nueva película “Babygirl”. En una reciente entrevista, la actriz australiana-estadounidense confesó que, durante las grabaciones de las intensas escenas íntimas de este drama erótico, llegó a sentirse tan abrumada que tuvo que detener la producción en varias ocasiones.
Kidman, de 57 años, interpreta a Romy, una poderosa empresaria que se ve envuelta en una apasionada relación con su joven pasante, Samuel, interpretado por Harris Dickinson. En el transcurso de la película, también se exploran las tensiones de su matrimonio con el personaje de Antonio Banderas.
El rodaje de “Babygirl” hizo que Nicole Kidman se cansara de tener orgasmos
Durante la entrevista, la ganadora del Óscar admitió que las escenas sexuales, que fueron cruciales para el desarrollo del filme, la llevaron a un nivel de agotamiento inesperado. “Hubo momentos en los que pensé: ‘Ya no quiero tener más orgasmos’. Fue agotador. La cantidad de emociones y la intensidad de las escenas fue abrumadora”, compartió la actriz.
Según ella, la acumulación emocional y física de las repetidas escenas íntimas hizo que llegara a experimentar una especie de burnout, algo que nunca antes le había sucedido en su carrera. A pesar de la dificultad, Kidman destacó la confianza y el ambiente seguro creado por la directora Halina Reijn, lo que le permitió explorar su personaje sin sentirse incómoda.
“Fue gracias a la dirección de Halina que pude llegar tan lejos. No creo que hubiera podido hacer esto con un director hombre”, agregó la actriz, enfatizando la importancia de la colaboración con una mujer en este tipo de escenas.
La carrera de Nicole Kidman parece volverse más atrevida con los años
El filme, que explora temas de poder, placer femenino y las complejidades de las relaciones, ha generado gran expectativa antes de su estreno. “Babygirl” también marca otro proyecto audaz en la carrera de Kidman, quien a lo largo de los años ha interpretado varios papeles desafiantes.
Kidman ha sido parte de proyectos que han explorado la sexualidad desde distintas perspectivas, como en “Eyes Wide Shut” y “Moulin Rouge”. La actriz, madre de cuatro hijos, ha sabido equilibrar su vida personal con una carrera que sigue rompiendo barreras, siempre en busca de nuevos desafíos. Ahora, con “Babygirl”, Kidman demuestra una vez más su capacidad para asumir roles intensos y emocionalmente demandantes.