El exjefe de marketing de NBC, John D. Miller, ha hecho declaraciones contundentes sobre su papel en la ascensión de Donald Trump a la fama a través del programa de telerrealidad The Apprentice.
En un reciente ensayo publicado en U.S. News & World Report, Miller expresó su arrepentimiento por haber contribuido a la creación de la imagen pública de Trump, que considera un “monstruo”.
Miller, quien lideró la campaña promocional del show, admitió que la serie ayudó a construir la narrativa de Trump como un empresario sumamente exitoso que vivía una vida de lujo.
Sin embargo, él mismo reconoce que esta representación era, en el mejor de los casos, una exageración considerable. A través de The Apprentice, se esparció lo que él llama “noticias falsas” sobre la figura de Trump, que se convirtió en un nombre familiar más allá de Nueva York.
Fracasos ocultos de Donald
El exejecutivo detalló que, a pesar de la imagen glorificada presentada en el programa, Trump había enfrentado múltiples fracasos empresariales, incluyendo cuatro quiebras antes de su aparición en la televisión.
John describe al ex presidente como una persona “manipulativa” pero a su vez “extraordinariamente fácil de manipular”, cualidades que asocia con sus tendencias autoritarias y su conducta durante el intento de derrocar los resultados de las elecciones de 2020.
Además, no se detuvo en criticar la influencia que The Apprentice tuvo en la política estadounidense. Concluyó su ensayo respaldando a Kamala Harris, sugiriendo que el país sería “mejor” bajo su liderazgo en comparación con Donald.
Afirma que la percepción de que Trump podría ser una mejor opción para los estadounidenses es, en realidad, una ilusión similar a la que promovió el exitoso programa de televisión.
Según seguidores en redes sociales, las declaraciones de John ponen de relieve cómo los medios pueden moldear la percepción pública y las implicaciones de esta influencia en la política contemporánea.