En un insólito incidente ocurrido en una subasta benéfica en Texas, un hombre pagó más de 4.000 dólares por una guitarra autografiada por Taylor Swift, solo para destruirla momentos después de adquirirla. El instrumento, firmado por la cantante y autentificado por los organizadores, fue subastado como uno de los objetos más destacados de la velada.
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Sin embargo, lo que parecía ser una donación generosa y culturalmente relevante terminó siendo el centro de un acto de protesta. El hombre, cuya identidad no ha sido revelada, tomó la guitarra tras la subasta y, con una actitud desafiante, la destrozó mientras el público lo ovacionaba.
Las redes explotan por video donde hombre destruye una guitarra de Taylor Swift
El evento, organizado por la Ellis County Wild Game Dinner para recaudar fondos en apoyo a la educación agrícola de jóvenes locales, se tornó polémico cuando el comprador decidió golpear la guitarra con un martillo frente a la audiencia. El incidente fue captado en video y rápidamente se volvió viral en las redes sociales.
En el video, se observa al comprador riendo mientras golpea repetidamente la guitarra con un martillo. Algunos asistentes aplaudieron la acción, mientras que otros se mostraron desconcertados por la destrucción de un objeto tan valioso. El subastador incluso le entregó al hombre una caja para que guardara los restos de la guitarra rota, entre risas y comentarios jocosos.
Este acto fue interpretado por muchos como una manifestación política en contra de Taylor Swift, quien recientemente ha mostrado su apoyo a la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris. Algunos creen que la destrucción de la guitarra fue una respuesta directa a las posturas políticas de la cantante.
Taylor Swift genera polémicas al dejar clara su posición política
En una región conservadora como Texas, conocida por ser un bastión republicano, las posiciones políticas de Swift han generado controversia entre los seguidores del expresidente Donald Trump. La reacción en redes sociales ha sido mixta. Mientras algunos ven el acto como una expresión legítima de descontento político, otros lo consideran un desperdicio de dinero que podría haber sido destinado a causas más significativas.
Además, se ha cuestionado el respeto por los artículos donados en eventos benéficos, considerando que el fin de la subasta era recaudar fondos para la comunidad. Hasta el momento, Taylor Swift no ha emitido declaraciones sobre lo ocurrido. Sin embargo, el incidente resalta la creciente polarización política en Estados Unidos.
