El príncipe Harry ya pisó suelo londinense, pero muchos preguntan por su esposa, Meghan Markle; quien esta vez decidió quedarse en Estados Unidos y no acompañar al duque de Sussex en su viaje a Reino Unido.
La duquesa, al parecer, tiene como prioridad el cuidado de sus hijos, el príncipe Archie y la princesa Lilibet, y decidió quedarse en Montecito, California, EEUU.
El príncipe Harry y Meghan separados
Mientras el príncipe Harry atiende sus compromisos en el Reino Unido, la situación parece preocupante, ya que él contó que duda en traer a su esposa al Reino Unido porque teme la amenaza de un ataque con ácido.
En una entrevista sincera para el programa Tabloids on Trial de ITV, Harry contó las preocupaciones que tiene por la seguridad de Meghan:
“Todo lo que se necesita es un actor solitario, alguien que haya leído estas cosas y decida actuar en consecuencia, ya sea con un cuchillo o con ácido”, explicó Harry. “Estos son temores reales para mí y son una de las razones principales por las que no traeré a mi esposa de regreso a este país”.
Los duques de Sussex y su familia
El príncipe Harry se mudó a California en 2020 y tienen dos hijos: Archie, de cinco años, y la princesa Lilibet, de tres años, en Montecito.
Si bien el príncipe asistirá a la ceremonia de entrega de premios WellChild este lunes, su mente está con su familia.
Recordemos que la última vez que Meghan Markle pisó el Reino Unido fue en septiembre de 2022 cuando asistieron a la cumbre One Young World en Manchester y debían aparecer en los Premios WellChild, pero no pudieron ir por la muerte de la reina Isabel II.
Ante la situación, la visita de Harry y Meghan al Reino Unido se extendió hasta el funeral de la difunta reina Isabel II en la Abadía de Westminster en Londres.