Lo que parecía a primera vista una pronta y satisfactoria solución, con el pasar de los días pareciera que la situación se complica cada vez más en el paro indefinido de actividades comandado por el Sindicato de Guionistas de los Estados Unidos WGA (Writers Guild of America, según sus siglas en inglés).
Muchas son las producciones que han expresado su preocupación ante la incertidumbre de saber cómo será el desarrollo de sus trabajos en el futuro. Una de las más destacables es sin duda, Stranger Things, super famosa y con millones de fanáticos que esperan con ansias la llegada de la última temporada, no obstante, la realidad es que la serie es también víctima del conflicto hollywoodense.
Última temporada incierta
Ante la conocida problemática generada desde el pasado 2 de mayo, los mismos productores de Stranger Things se expresaron al respecto y sin nada que ocultar, explicaron mediante un comunicado difundido en la cuenta oficial de la serie en Twitter, las razones del porqué no se pueden atrever vaticinar cuando sería la publicación de la quinta y última temporada.
Los hermanos Duffer, creadores del fenómeno de Netflix, en solidaridad con sus colegas del sindicato WGA en la lucha para obtener mejoras salariales y nuevos contratos, expresaron en el tuit que: “La escritura no se detiene cuando comienzan las grabaciones. Aunque estamos entusiasmados por comenzar con el rodaje junto a nuestro asombroso elenco y equipo técnico, no podemos hacerlo durante la huelga. Esperamos que se llegue pronto a un acuerdo así todos podemos volver al trabajo. Hasta entonces: cambio y fuera”.
Con el comienzo de las grabaciones de la quinta y última temporada de la ficción confirmado para comienzos del verano boreal, algunos ya arriesgaban posibles fechas de estreno de los nuevos episodios que ahora quedaron en suspenso y sujetos a cómo se resuelva el conflicto entre el gremio de escritores y la Alianza de Productores de Cine y Televisión, la asociación que nuclea a los grandes estudios de Hollywood.
El apoyo explícito a sus colegas de los reconocidos creadores de Stranger Things, supone un tajante rechazo al intento de los ejecutivos de forzar a los showrunners, en esencia escritores, a trabajar en sus proyectos durante la huelga, ya que unas horas antes de que los hermanos Duffer dieran a conocer su posición Disney, Warner y otros poderosos integrantes de la asociación de productores enviaron cartas instando a los showrunners bajo contrato a seguir con sus tareas.