A pesar de que “El Chavo del 8″ es una producción mexicana que tuvo sus primeros capítulos y auge en la década de los años 70, aún en estos tiempos sigue siendo reconocida y es capaz de entretener al público infantil y mayor.
Se habla de un clásico que triunfó no sólo en México, sino en gran parte de América Latina.
Específicamente, en Brasil tuvo un gran auge. Y es que la serie de comedia fue adaptada con el nombre de “Chaves”, para convertirse en un símbolo que ejemplificaba muy bien la realidad del gigante sudamericano.
A la gente le fascinó la historia de un niño pobre que vivía en una vecindad, rodeado por sus amigos, con quienes protagonizaba toda clase de chistes, confusiones y relatos cómicos.
En Brasil vieron semejanzas con los personajes humildes, que protagonizaban peleas, discusiones, malentendidos, romances y atrasos en los pagos de la renta.
El Sistema Brasileño de televisión (STB) compró los derechos de transmisión y renovó esporádicamente para mantener al aire al “Chaves”.
Para inicios de 2000, la empresa recopiló algunos episodios para realizar una obra conmemorativa. Justo en esa época, el presentador Gugu Liberato creó una serie nacional con una trama muy parecida a “El Chavo del 8″, que se desarrolla en una vecindad, con adultos interpretando papeles de niños.
Pero lo que más sobresalía era que “Miguelito”, el protagonista de la serie, también portaba gorro y tirantes.
Aunque se negó una comparación con el “Chavo del 8″, la mayoría de las personas se remitieron al famoso programa realizado por Roberto Gómez Bolaños.
El proyecto sufrió una serie de retrasos y salió al aire hasta un par de meses después de lo planeado. Después, la emisora simplemente descartó la continuidad de la serie.
En RedeTV!, “Miguelito” sólo duró una semana al aire. El director Rogério Gallo indicó que la serie no tenía calidad y la clasificó a la producción de un clon de “El Chavo del 8″.
Ahora sus episodios son inaccesibles, sólo es posible encontrar algunos promocionales en YouTube. Sin duda, la serie cargó con el duro peso de la producción mexicana.