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Conoce por qué la reina Isabel no quiso posar con la hija de Meghan y Harry

La visita de la pareja con sus hijos pasó de bajo perfil. No hubo foto oficial con ellos. El equipo de la reina tenía motivos.

Inglaterra celebró por todo lo alto los 96 años de la reina Isabel II. No han faltado las actividades festivas en diferentes ciudades del reino pero también ha habido espacio para las reuniones familiares.

Justamente en esta parte entran Harry y Meghan, quienes ya no son considerados miembros de la familia real británica pero no pueden negar el nexo con la monarca, ya que Harry es su nieto. Sin embargo, las estrictas normas protocolares los hicieron a un lado, tanto, que no hay foto oficial de la pareja ni de sus hijos Archie y Lilibet Diana.

Sin fotos

“De acuerdo con el medio The New York Post, hay dos supuestas versiones al respecto. La primera señala que fue la propia monarca británica quien se negó a ser fotografiada junto a la hija menor de los duques de Sussex, para evitar que se filtraran las imágenes en todo el mundo, principalmente en medios estadounidenses”, citó Tiempox.com.

Fue el sábado pasado cuando Lilibet Diana celebró su cumpleaños número uno en un jardín de Frogmore Cottage. Todos esos primeros meses de vida los pasó muy lejos de la familia real, ya que sus padres se radicaron en Estados Unidos, de modo que la niña apenas era presentada ante los más allegados a la reina y a ella misma, que no la conocía.

Distancia evidente

Se supo que en la fiesta íntima estuvo presente la reina Isabel II y algunos amigos y familiares cercanos a Harry y Meghan, pero para enrarecer más el ambiente, no estuvieron presentes ni los duques de Cambridge ni el príncipe Carlos, ya que debieron cumplir con sus compromisos agendados por el Jubileo de Platino.

Para el resto de los mortales en este planeta, apartando las agendas, se vio muy feo que ni el padre ni el único hermano de Harry le acompañaran en la reunión, lo que echa más sal a la herida de la fractura que hay entre ellos a raíz de la decisión del menor de Lady Diana de vivir liberado de los convencionalismos monárquicos.

Pero la lógica británica pone escala de grises, ya que desde el llamado “Megxit”, el rebelde Harry y su esposa no son muy bien vistos. “En Reino Unido, la pareja es muy impopular (63% de opiniones desfavorables, según el instituto YouGov) y también lo es para los tabloides, que no dejan pasar la oportunidad de criticarla”.

“Su partida ha dejado el sentimiento de que han dado la espalda no solamente al país, sino a la reina, a la institución”, opinó recientemente Omid Scobie, autor de un libro sobre la pareja. “Son detestados, y creo que todo lo que hagan será amplificado de forma muy negativa”, citó Infobae.

De este modo, la visita de Harry y Meghan a Londres pasó por debajo de la mesa. En los dos eventos públicos a los que asistieron se hizo evidente el distanciamiento que hay con William y Kate Middleton. El domingo, al terminar su visita a la abuela, los niños y sus padres regresaron a Estados Unidos en un jet privado.

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