Distintas son las historias que nos ha dejado por ahora la lamentable guerra que se disputa actualmente entre Rusia y Ucrania. La situación de los refugiados y el desespero para poder escapar del conflicto bélico han sido uno de los temas que más han abordado distintos medios de comunicaciones internacionales.
Recientemente se conoció la particularidad historia de dos modelos ucranianas que por cuestiones del destino están varadas en Italia y debido a la guerra no pueden entrar en su país de origen. Ambas trabajaron en la Semana de Moda de Milán el pasado mes de febrero, momento exacto en que comenzó el problema entre Rusia y Ucrania.
Ahora, mientras están exiliadas y esperan una solución para sus situaciones, se dio a conocer por parte de la agencia de noticias AFP, que forman parte del voluntariado italiano para ayudar a los miles de refugiados ucranianos que han entrado a dicho territorio armando paquetes con alimentos, medicamentos y dibujos.
Bogdana Nevodnik
Modelo profesional de 22 años, es una de las tantas personas ucranianas exiliada hasta los momentos por la guerra. En declaraciones para AFP Nevodnik comentó que vive la guerra con bastante preocupación e incluso, cuando las sirenas de alerta por los bombardeos suenan en su ciudad natal, ella se despierta o está al tanto gracias a una aplicación en su teléfono celular.
“Sentía que era algo estúpido, irreal, estar en la pasarela mientras la gente estaba muriendo, me daba vergüenza y tenía la impresión de que al público no le importaba realmente”, expresó su punto de vista con respecto a la Semana de Moda en Milán y la iniciativa bélica europea.
“Estoy dispuesta a arriesgar mi vida por Ucrania, si es necesario me uno al ejército. Hay muchas mujeres. Bombardean centros de maternidad con mujeres embarazadas adentro, ¡Cómo puede ser eso un objetivo estratégico!”, concluyó indignada Bogdana Nevodnik.
Valya Fedotova
Entre las decenas de voluntarios que hacen vida en la embajada de Ucrania en Milán se encuentra esta joven modelo de 20 años.
Fedotova fue también crítica cuando los medios le consultaron como vivió el inicio de la guerra mientras trabajaba en las exclusivas pasarelas de moda en Italia. “Mucha tristeza ver como se iniciaba la guerra en mi país mientras me tocaba trabajar fuera de él. Pero no se puede llorar en la pasarela, me pagan para ello y además así puedo enviar dinero a mi familia en Ucrania”.
Valya Fedotova contó que está compartiendo un departamento con otras seis modelos ucranianas afectadas por la guerra. Sobre su núcleo familiar, agregó que su madre y dos hermanas pudieron huir hacia Polonia pero que su padre tomó la determinación de quedarse para cuidar su hogar, acompañado con su gato.