Vicente Fernández dejó un legado que va más allá de sus éxitos musicales, esto debido a que desde hace varias décadas el ídolo ranchero fue creando distintas empresas bajo el paraguas de su propio nombre.
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Conscientes del gran impacto que tenía en su público, Fernández y su familia supieron diversificar su presencia en el negocio del espectáculo hasta generar todo tipo de productos y servicios, desde la venta de llaveros, perfumes o tequila, hasta tener su propia empresa de taxi aéreo.
Oriundo de Jalisco, Vicente Fernández nació y creció en un hogar modesto con constantes privaciones económicas, pero su pasión por la música lo fue llevando hacia la fama, luego de pasar años cantando para compañeros de trabajo, fiestas familiares y restaurantes.
El emporio de Vicente Fernández
Informes obtenidos por la revista Forbes indican que el cantante poseía 33 marcas comerciales y en sociedad con sus hijos sumaban 88 con otras 25 empresas relacionadas con la producción y venta de tequila, la organización de espectáculos musicales, desarrollos inmobiliarios y tecnología, entre otras áreas.
La marca “Vicente Fernández” se registró en el año 2003 para la fabricación y venta de vestuario, calzado, sombrero, perfumes, papel, fotos y calendarios. Bajo el nombre de “VFG”, también se timbraron productos de piel (bolsos, carteras, monederos y artículos de equipaje), además de servicios de publicidad y gestión de negocios comerciales, citó una nota de la revista Clase.
Por si fuera poco, otra marca registrada con el nombre de “Chente Fernández”, se encargaba de los servicios relacionados con actuaciones musicales, la organización de conciertos y servicios de artistas de espectáculo.
Entre las pasiones del ídolo ranchero se contaban la vida en su rancho y el buen tequila, así que no era de extrañar que lanzara el sello “Don Vicente” que fabricó su propio licor, y además figuraba como accionista mayoritario de la compañías: Ganadería Rancho la Ciénega y El Caminante Taxi Aéreo.
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Todas estas exitosas iniciativas comerciales las manejó de la mano con sus tres hijos: Vicente Jr., Gerardo y Alejandro, quienes por su parte también emprendieron negocios apoyados en la indiscutible fama de su padre.
Venden comida y joyas
Según el informe, el primogénito Vicente Fernández Jr., registró la marca “Vicente Fernández JR.” dedicada a la venta de perfumería, vestuario, calzado y organización de eventos en vivo.
Gerardo Fernández “es propietario de 20 marcas comerciales, como la “Arena VFG”, que es un auditorio con capacidad para más de 11 mil personas que está al interior del rancho “Los Tres Potrillos” y en donde Vicente Fernández fue velado”.
También revela que el segundo de los Fernández maneja la marca “Los Tres Potrillos”, que ofrece servicios de alimentos, bebidas, guacamole, salsa de aguacate, aceite de aguacate y opera un restaurante.
Por último, Alejandro Fernández, que siguió los pasos de su padre como cantante, es el propietario de 15 marcas comerciales y es socio o propietario de 20 empresas radicadas en Guadalajara.
El llamado “Potrillo” administra otra empresa dedicada a la producción y venta de flores, además de estar al frente de un negocio de venta de joyas, piedras preciosas y relojes con la marca “AF Alejandro Fernández”.
Otra de las empresas creadas por Alejandro se llama “MPT Entertainment For Value”, con esta otorga servicios de educación, actividades deportivas y culturales. Así como su papá, a través de su marca “El Potrillo”, fabrica y vende vestuario, calzado, sombreros y bebidas alcohólicas.
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