Jamie Lynn Spears, hermana menor de la Princesa del Pop, Britney Spears, y protagonista de la serie infantil Zoey 101, sacará un libro donde revelará grandes cosas sobre su vida.
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Una de las partes más impactantes que se llegó a conocer del libro que llevará por nombre “Things I Should Have Said”, que en español sería “Cosas que debí haber dicho”, es que sus padres y equipo querían que abortara.
Recordemos que Jamie Lynn se estaba abriendo camino en el mundo del espectáculo gracias a la popular serie que protagonizó, hasta que anunció su embarazo.
La serie fue cancelada, y la hermana de Britney fue duramente criticada por convertirse en una madre adolescente. Se alejó de la actuación y se enfocó en ser madre.
Fue aislada y le prohibieron decirle a Britney Spears que estaba embarazada
En el 2007 cuando les anunció a sus padres y a la compañía que la representaba de su embarazo, Jamie Lynn Spears, confiesa que empezó a vivir un infierno.
No la dejaban salir, y constantemente recibía visitas de sus padres, familiares y representantes quienes le pedían que tomara una pastilla para abortar, ya que de lo contrario arruinaría su joven y prometedora carrera, pero siempre se negó a hacerlo.
También le dijeron que podía dar a su bebé en adopción. Incluso después de dar a luz, se peleó fuertemente con su papá cuando insistió en la adopción.
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Cómo se rehusó a aceptar algunas de sus propuestas, sus padres le quitaron el teléfono y le prohibieron que le dijera a su hermana que estaba embarazada.
En su libro confiesa que ese fue una de las cosas que más siente de todo ello, no haberle podido decir nada a su hermana en el momento que más la necesitaba.
Su equipo en vista de la negativa de Jamie Lynn Spears de deshacerse de su bebé, decidieron vender la historia a la revista Ok, para sacar alguna tajada de ello.
Su madre la llevó a una cabaña, que ella cree estaba en algún lugar de Connecticut, hasta que la revista publicara la noticia. Jamie Lynn Spears afirma que a su madre le encantaba demostrar lo mucho que estaba decepcionada de ella mientras estaban en la cabaña.
Fanáticos de Britney Spears aseguran que las confecciones del libro son intento para quitarse la culpa
Los fanáticos de la Princesa del Pop han luchado por años para ayudar a su artista favorita, incluso la propia Britney Spear admitió que gracias al movimiento #FreeBritney que promovió su fanaticada por las redes sociales, ella encontró el valor para luchar por su libertad.
En las confesiones públicas que hizo la artista en la corte sobre su familia, comprobó lo que muchos fanáticos sospechaban, que su familia abusaba de ella para controlar su fortuna.
Hasta su hermana menor, quien se creía era muy cercana a Britney Spears, salió mal parada de todo ello. Pues según sus declaraciones, toda su familia la utilizaba, sin importarle nada su bienestar.
Luego de estas declaraciones, Jamie Lynn Spears, quién estaba promocionando una serie en la que participaba lo único que comentó fue que su hermana siempre contaría con ella. Pero la propia Britney le replicó en redes sociales que eso no era cierto.
Desde entonces los fanáticos de Britney le han atacado constantemente por redes sociales, donde le piden que deje de mentir y de colgarse del dinero y fama de su hermana.
Ahora con la noticia del libro, los fanáticos de Britney volvieron a arremeter contra Jamie Lynn Spears, pues consideran que es un burdo intento para quitarse la culpa y verse como otra víctima de sus padres.
Aunque viendo todo lo que le hicieron pasar a su hija mayor, a lo mejor Jamie Lynn Spears tampoco la tuvo que tener tan fácil.