El estreno de Senna en Netflix, la miniserie que retrata la vida del legendario piloto de Fórmula 1, Ayrton Senna, ha comenzado a enganchar a todos en las historias que involucraron al brasileño a lo largo de su vida. Dentro de la pista, Senna fue protagonista de muchos eventos, pero fuera de ella también dio mucho de qué hablar con sus romances.
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La vida de los pilotos de Fórmula 1 no solo está llena de adrenalina y pasión por el deporte, pues también existe una gran burbuja de lujos y privilegios que les permiten a muchos ser todos unos ‘casanovas’ y Senna no fue para nada la excepción.
¿Quiénes fueron los amores de Ayrton Senna?
En primera instancia, el primer amor que se conoce del tricampeón es Lilian de Vasconcelos Souza, quien fue su primera esposa. Aunque su matrimonio con el icónico piloto de McLaren duró poco, su historia sigue siendo recordada por quienes han seguido de cerca la vida del ícono brasileño.
Lilian y Ayrton se conocieron durante su infancia en Tremembé, un barrio de São Paulo, y rápidamente construyeron una amistad que más tarde se transformó en romance. A los 19 años, Lilian decidió dar un paso importante en su vida y se casó con Senna el 10 de febrero de 1981.
Sin embargo, como ella misma expresó en una entrevista: “No amaba a Ayrton porque era un piloto de carreras, amaba al chico que siempre vivió en mi corazón” y por este motivo y el exigente estilo de vida del piloto, el matrimonio llegaría a su fin en 1982.
La otra relación que tuvo Senna durante estos años apenas se reveló luego de su muerte. Se trata de la que fue su ‘novia secreta’, Adriane Yamin. Adriane contó su historia con Ayrton en el libro que publicó en 2019, “Mi chica”, tal como la llamaba el corredor. La brasileña declaró que esperó a que sus hijos fueran mayores para dar a conocer el relato de su noviazgo de bajísimo perfil con el tricampeón, que generó mucha polémica puesto que se dio cuando ella tenía 15 años y Senna 24.
En diálogo con Teleshow, Adriane recordó cómo conoció a Senna en 1984. “Fue en el barco de mi familia. Mi padre y el de Ayrton, el señor Milton (fallecido a fines de 2021) fueron vecinos en mi infancia y aunque sus vidas se distanciaron a medida que prosperaron, se formó una gran admiración mutua y mantuvieron su vínculo. Muchos años después, mi padre se cruzó con Ayrton caminando por Playa Dos Macacos en Angra dos Reis (una playa a la que solo se puede acceder en barco), lo reconoció, lo saludó y lo invitó a acompañarnos al día siguiente. Fue entonces cuando Ayrton y yo nos conocimos”, relató.
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Luego de Lilian y su ‘novia secreta’, Ayrton disfrutaría de su soltería de forma discreta y sin alguna pareja oficial hasta a empezar la que sería su relación más mediática: la que inicio con la famosa presentadora y actriz brasileña Xuxa, a finales del ‘88, luego de haber conquistado su primer título mundial en la F1.
Aunque ambos vivieron el romance con mucha pasión, este también llegó a un abrupto final, nuevamente causado por la dedicación que el piloto tenía a su profesión, pero también la que Xuxa tenía a la de ella. “Puedo decir que una sola vez en toda mi vida sentí aquí dentro el deseo de tener una nueva familia. Una sola vez en toda mi vida soñé con tener un hijo. Fue con ella. Con Xuxa”, expresó Senna para la revista Playboy en agosto de 1990, marcando lo que sería el final de esa relación.
Por último, fue Adriane Galisteu el último amor que se le conoció al atleta. Senna había conocido a Adriane en el boliche Limelight de San Pablo en una fiesta que se llevó a cabo en la noche del 28 de marzo de 1993, luego de disputar el Gran Premio de Interlagos. En poco tiempo, lograron una fuerte conexión y comenzaron a salir. Sin embargo, la joven nunca fue reconocida ni aceptada por el círculo íntimo de Senna. Incluso, durante el velorio multitudinario en Brasil, fue Xuxa quien se sentó junto a la hermana y madre del piloto y ocupó su lugar.
La modelo habría sido la última persona con la que Ayrton habló por teléfono. “La última llamada de él fue para mí, veinte minutos antes de entrar en la pista. Él estaba muy nervioso. En los días anteriores, Ubinho (Barrichello) había sufrido un accidente grave y Ratzenberger había muerto en la pista. Ayrton estaba desesperado”, reveló Galisteu un tiempo después a la revista Contigo.
