La FIFA confirmó en octubre de 2023 a Arabia Saudita como la sede del Mundial 2034, una designación que desde su primer momento generó controversia en la comunidad internacional. El anuncio de Gianni Infantino, presidente de la FIFA, fue recibido con fuertes críticas de organizaciones de derechos humanos, entre ellas Amnistía Internacional y otros diez grupos, quienes han cuestionado la capacidad de Arabia Saudita para cumplir con los estándares internacionales en esta materia.
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En un informe contundente, los grupos señalaron que el país no garantiza libertades básicas y derechos fundamentales, especialmente en temas de libertad de expresión, derechos de la comunidad LGBTI+, igualdad de género y protección laboral para los trabajadores migrantes.
Cabe destacar que la misma situación se generó en el pasado, específicamente cuando Qatar fue denunciado en reiteradas oportunidades por acusaciones, entre las que incluyeron la muerte de varias personas que trabajaron en condiciones inhumanas, además, por ser una nación donde la situación de los derechos humanos es desde hace décadas un punto de fricción, sin embargo, desde la FIFA prefirieron hacerse los desentendidos para priorizar las enormes y jugosas ganancias económicas que brindó el país sede en el posterior desarrollo del magno evento.
Detalles del duro informe
El reporte de Amnistía Internacional destaca lo que considera una “deficiente evaluación” de Arabia Saudita en su propuesta para albergar el evento.
“Omite aspectos críticos como la falta de libertad de expresión, la represión hacia la comunidad LGBTI+, el sistema de tutela masculina que limita los derechos de las mujeres y la falta de protección laboral para los trabajadores migrantes”, subraya el informe.
En respuesta a la polémica, los grupos de derechos humanos han exigido que la FIFA revise su decisión e implemente “criterios rigurosos” en cuanto a derechos humanos en sus futuras selecciones de sedes. La FIFA, hasta el momento, no ha emitido un comunicado oficial sobre las objeciones planteadas.
Por su parte, Arabia Saudita, ya ha detallado ante la FIFA su ambicioso plan de infraestructura para recibir a millones de turistas y fanáticos del fútbol en 2034. El proyecto incluye la construcción de 15 estadios de última tecnología en cinco sedes estratégicas: Riad, Jeddah, Khobar, Abha y la futurista ciudad de NEOM.
De los recintos proyectados, 11 serán edificados exclusivamente para la Copa del Mundo, con tres de ellos ya en proceso de construcción. Se espera que el estadio principal esté listo para 2029, en línea con los requerimientos de la FIFA.
