El Estadio Santiago Bernabéu, tras su extensa renovación y ampliación ahora enfrenta problemas inesperados que afectan tanto a los residentes cercanos como a la directiva del Real Madrid.
La reciente modernización que requirió una inversión de más de 750 millones de euros, tenía el objetivo de transformar el estadio en un recinto multifuncional para acoger no solo eventos deportivos sino también conciertos y otros espectáculos.
Sin embargo, en esta semana se conoció que dicha meta se ha visto comprometida por cuestiones de sonido, por ello, se anunció la determinante decisión de suspender varios conciertos programados con meses de anterioridad, como es el caso de Dellafuente (15 de noviembre), Aitana (28 y 29 de diciembre), Lola Índigo (22 de marzo de 2025) y el Music Bank World Tour (12 de octubre).
Sonido desbordado que generó quejas
Tras un estudio realizado en las últimas semana, se detalló que el nivel de decibeles producido en el estadio supera los límites permitidos, situación que llevó al club a tomar medidas drásticas.
Mediante un comunicado, el Real Madrid explicó que “a pesar de las condiciones de insonorización del estadio y de las medidas de refuerzo que se han implementado, el cumplimiento de la normativa ha sido un desafío para los organizadores y promotores de los eventos. Estamos trabajando para asegurar que durante los conciertos se mantengan las condiciones adecuadas para la producción y emisión de sonido que permitan celebrar estos eventos en nuestro estadio”.
La cancelación de estos conciertos implica una pérdida significativa de ingresos proyectados para 2025. Además, el Santiago Bernabéu requerirá una inversión adicional para instalar paneles acústicos especiales y ajustar la disposición de altavoces y sistemas de sonido para cumplir con las normativas de ruido y evitar futuras complicaciones.