Las autoridades francesas tomaron severas medidas de seguridad para los Juegos Olímpicos y especialmente para la Ceremonia de Inauguración, que se realizó al atardecer de este viernes 26 de julio. Una de las medidas más drásticas fue el cierre del espacio aéreo de París.
Ese cierre fue un operativo en un amplio radio de 150 kilómetros en torno a la capital y supuso que sus tres principales aeropuertos (Orly, Charles de Gaulle y Beauvais) suspendieron sus despegues y aterrizajes una hora antes del inicio de la Ceremonia, que comenzó a las 7.30 pm local.
¿Cómo se realizó la vigilancia del espacio aéreo?
La vigilancia se hizo a través de una red de radares, drones, militares patrullando terrenos en la región de París e incluso vigías tradicionales.
Una veintena de aviones de caza volaron por la zona “dispuestos a intervenir en cualquier momento”, explicó el general Laurent Rataud, comandante de la Defensa Aérea de Francia en declaraciones a France Info.
Justamente durante el desarrollo del majestuoso evento, los usuarios revisaron esta situación a través de Flightradar24. Al observar, se detalla que el espacio está despejando ya que no hay tráfico aéreo en la nación anfitriona de los Olímpicos.
Entre las hipotéticas amenazas figuran, desde un avión comercial secuestrado hasta un dron, pasando por un parapente a motor, añadió Ratau.
La seguridad de los Juegos Olímpicos sí sufrió momentos de emergencia durante la mañana de este viernes, con atentados sobre las vías férreas de los trenes de altas de velocidad, que obligó a suspender viajes, incluyendo donde viajaban algunos deportistas hacia la Ceremonia de Inauguración en el río Sena.