Undertaker se despidió de los encordados en abril de 2022, pues le puso fin a una carrera que duró más de 30 años, en los que se convirtió en un ícono de la lucha libre en Estados Unidos y del mundo.
El esteta se mantuvo en la élite del deporte por el profesionalismo que lo caracterizó.
Undertaker, una leyenda viviente de WWE
De hecho, nunca se le vio fuera de forma, por lo que es un ejemplo para las nuevas generaciones de estetas. Durante varios años, “Taker” protagonizó el evento estelar de WWE, WrestleMania.
Incluso, tiene el récord de 21 victorias consecutivas, hasta que la racha se vio interrumpida por la caída ante Brock Lesnar. Además, también perdió ante Roman Reigns, por lo que sus números quedaron en 25 triunfos y dos derrotas.
Sin embargo, el luchador, que tiene un gran tamaño, tiene una fobia que pocas personas conocen y que le da pena. Y es que, el esteta le tiene pavor a los pepinos.
¿Por qué le tiene miedo a los pepinos?
“Vamos a poner esto claro, no diría que le tengo miedo a los pepinos, simplemente no me gusta verlos u olerlos. Digamos que si hoy en esta entrevista alguien entra con pepinos me voy, no importan si son en un vaso, una ensalada o un té, me voy, pero no salgo corriendo”, relató en el documental “The Last Ride”.
El origen de su fobia nació en su infancia, así lo relató Paul Bearer, quien fue un gran amigo del luchador por varios años, confesó que un día lo vio vomitar, porque le pusieron pepinos en su helado.
“Vi vomitar en un restaurante a un hombre, pidió un té helado y le pusieron un par de rodajas de pepino. Simplemente no lo tolera, es algo que va más allá de él. Viene desde su niñez, si mal no recuerdo fue su madre quien lo obligó a comer pepinos a diario, porque le decía que era un alimento con enormes propiedades. Eso hizo que lo odiara, que incluso les tuviera miedo”, relató.