La Fiscalía de la Audiencia Nacional en España interpuso una querella contra Luis Rubiales por los delitos de agresión sexual y coacciones en su escandalo con la jugadora Jenni Hermoso, tras la conquista de la Selección española de futbol femenina de la Copa del Mundo. La teniente fiscal ha pedido a la Audiencia Nacional que abra causa contra el dirigente deportivo y le cite a declarar como imputado por el beso en la boca a Hermoso en Australia, durante la ceremonia de entrega de medallas.
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La futbolista compareció el pasado martes a puerta cerrada tras el ofrecimiento que le hizo el Ministerio Fiscal cuando abrió diligencias para investigar estos hechos por posible delito de agresión sexual y la teniente fiscal de la Fiscalía de la AN, Marta Durántez, tomo estas acciones acorde a la calidad de víctima de Hermoso.
La denuncia pide que se cite a declarar en sede judicial a Rubiales como imputado y a la futbolista en su condición de víctima tras relatar esta última en la Fiscalía que ha sufrido una “presión constante y reiterada” del entorno de Rubiales. Del mismo modo pide que se recabe información de las autoridades australianas sobre la tipificación de los delitos contra la libertad sexual en sus normas penales.
De ser hallado culpable, Rubiales podría ir a prisión
Los delitos que la Fiscalía atribuye a Rubiales están penados ambos con prisión. En lo que respecta a la agresión sexual (artículo 191 del Código Penal) se enfrenta a una pena de entre 1 y 4 años de cárcel, mientras que las coacciones (artículo 172) contemplan una pena de seis meses a 3 años y medio.
“La jugadora, así como su entorno más próximo (familia y amistades) sufrió una presión constante y reiterada por parte del Sr. Rubiales y el entorno profesional de este, con la finalidad de que, públicamente, justificara y aprobara el acto cometido contra su voluntad; sufriendo Dª Jennifer una situación de hostigamiento, en contra del desarrollo de su vida en paz, tranquilidad y libremente”, reza la querella.
Además, confirma la competencia de la Audiencia Nacional para investigarla al tratarse de unos hechos cometidos por ciudadano español en el extranjero. Ahora el asunto queda en manos de la Audiencia Nacional, la cual ha confirmado que la querella ha ido a reparto y ha recaído en el Juzgado Central de Instrucción número 1. Su titular, el magistrado Francisco de Jorge tiene ahora que decidir si abre causa contra el presidente suspendido de la Real Federación Española de Fútbol o desestima la petición del Ministerio Fiscal.
