Comenzaron los octavos de final del Mundial de Fútbol de la FIFA, Qatar 2022, y con ello arrancó la recta final para saber si Francia puede repetir la hazaña lograda en Rusia 2018 o si el mundo del balompié tendrá un nuevo monarca.
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Por ahora ya sabemos que aguardan para jugar los cuartos de final los Países Bajos, Argentina, Francia e Inglaterra y en esta jornada del lunes 5 de diciembre se conocerán dos clasificados más en la que Japón, la gran sorpresa del torneo, puede integrar el selecto grupo de las mejores ocho selecciones.
Nadie puede negar que los nipones son una verdadera potencia económica a nivel mundial, pero hasta los momentos ese poderío no se ha demostrado en el ámbito futbolístico, por ello, para no escapar de las ganancias millonarias más las influencias que mueve el deporte, diseñaron un plan de 100 años que está en marcha desde la década del 90 del pasado siglo XX para intentar ser campeones del mundo dentro de un plazo que vencerá en el 2092.
100 años para ganar la Copa del Mundo
Si se resume la historia de Japón en mundiales, la realidad es que no hay mucho que contar. Su primera clasificación a un Mundial fue en Francia 1998, seis años después de que comenzar su plan. Su actuación no fue buena ya que se despidieron en fase de grupos sin sumar ni siquiera un solo punto.
Cuatro años después organizaron junto a Corea del Sur el mundial del 2022 y dieron el primer paso del plan al clasificar por primera vez a octavos de final. Desde entonces, disputaron todos los Mundiales que le siguieron, siendo Alemania 2006 y en Brasil 2014 los que quedaron fuera en primera ronda, mientras que en Sudáfrica 2010, Rusia 2018 y ahora Qatar 2022 los que avanzaron de instancia.
La primera estrategia de la Federación Japonesa de Fútbol (JFA) fue parecida a la de Estados Unidos: llevar a estrellas en la última etapa de su carrera. Entre los primeros que llegaron se destacan el brasileño Zico y el inglés Gary Lineker, no obstante, Japón sabía que fichar futbolistas en el ocaso de sus carreras no ayudaría a que fuera campeón del mundo.
A partir del entonces se profesionalizó el torneo local, que hasta entonces estaba conformada por 12 grandes empresas niponas que competían entre sí con jugadores que lejos estaban de dedicarse por completo al deporte y con los resultados de Francia 98 se supo que ese era el camino ha seguir durante los próximos 100 años.
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Cada vez más jóvenes japoneses llegan a las principales ligas Europa, luego de que otros como Hidetoshi Nakata, Shinsuke Nakamura, Keishuke Honda, Shinji Kagawa o Shinji Okazaki abrieran el camino. Uno de los grandes ejemplos es Take Kubo, de 21 años, que desde 2019 está en La Liga de España y pasó por el Mallorca, el Villareal, el Getafe y ahora milita en Real Sociedad. Hiroki Abe, de 23 años se sumó a la filial del Barcelona que milita en la segunda división. Algo similar sucede con Takuhiro Nakai, más conocido como Pipi, que en el 2020 con apenas 16 años forma parte del Real Madrid y en este 2022 renovó contrato por tres temporadas más.
Así que pase lo que pase en este mundial con Japón, para su federación es una gran ventaja al quedarse como líder del grupo al derrotar nada más y nada menos que Alemania y España. De quedarse afuera en el partido de hoy o en las próximas instancias, todavía le quedarán setenta años para lograr el objetivo final.
