Es una realidad que OnlyFans llegó para convertirse en una de las plataformas más populares de la actualidad.
Cada vez son más las celebridades, deportistas, exatetas, influencers y modelos que entran a la aplicación, con la finalidad de convivir más de cerca con sus seguidores, mientras obtienen algunos miles o millones de dólares.
Lo cierto es que OnlyFans es un sitio que puede ayudar a los creadores de contenido, que se se encuentran en problemas financieros y beneficiarlos para darle un giro de 180 grados a su vida.
Renee Gracie, la piloto de autos que dejó las pistas por OnlyFans
Tal es el caso de de Renee Gracie, una piloto de autos de carreras, que después de atravesar conflictos económicos, encontró en la plataforma una opción para mejorar su calidad de vida.
Dejó las pistas por falta de recursos
La joven australiana, de 27 años, era una prodigio de las pistas. Fue participante de las categorías V8 Supercars Dunlop series, Bathrurst y Super2 Series, entre los años 2012 y 2017.
Sin embargo, sus problemas económicos y la falta de oportunidades la obligaron a abandonar las pistas, a pesar de ser la primera mujer que compitió en la Copa Porsche Carrera, de Australia.
Además, la oceánica reveló que sufrió acoso en la industria automovilística y severas críticas por parte de los hombres.
Pero los comentarios machistas no le importaron y, en 2015, pasó al campeonato V8 Supercars Dunlop Series, junto al equipo Paul Morris Motorsport, mientras laboraba en un McDonald’s para sustentar sus gastos en las pistas.
Optó por la industria para adultos y OnlyFans
Sin embargo, llegó a un punto en el que tuvo que abandonar la adrenalina de las carreras.
Fue en 2019 cuando ingresó en la industria para adultos y más tarde abrió su cuenta de OnlyFans, donde suma grandes cantidades de dinero.
Ahora, su regreso a las pistas parece casi imposible. “En este momento, los V8 Supercars han dejado claro que sería difícil para mí volver. La gente de la organización de las carreras y los sponsor, criticaron mucho mi posible regreso”, indicó la australiana.