La Selección Mexicana ha tenido entre sus filas a grandes jugadoras. Sin embargo, como pocas ocasiones en la historia, el conjunto Tricolor ahora tiene a unas hermanas.

Se trata de Silvana y Tatiana Flores, quienes actualmente son parte del equipo Sub-20 que está buscando su pase a la Copa del Mundo.

Las futbolistas son hermanas de Marcelo, el elemento del Arsenal juvenil que se perfila como una de las grandes joyas del balompié azteca.

El talento corre por la sangre de estos tres jóvenes, quienes todavía no se decantan por completo para representar a una selección.

De momento, Silvana y Tatiana eligieron a México, motivo por el que están disputando la Eliminatoria al Mundial de Costa Rica 2022.

La historia de las jugadoras tiene muchas vertientes. Son hijas de Rubén Flores, exfutbolista mexicano. Sin embargo, nacieron en Canadá, pero sus abuelos son ingleses, por lo que cuentan con tres nacionalidades.

La Selección de Inglaterra ha contado con el talento de estas chicas, pero tomaron la decisión de apartarse, por el cariño que sienten por México.

El talento de ambas las tiene en grandes equipos del Viejo Continente (Arsenal y Chelsea respectivamente).

Tatiana arrancó su camino con los Gunners, pero en junio de 2020 los Blues compararon su carta, por lo que ahora pertenece a una de las instituciones más destacadas del balompié femenil.

Por su parte, Silvana decidió quedarse en el Arsenal, compartiendo institución con su hermano. De hecho, su talento la tiene como una de las prospectos más importantes del club, situación por la que el Tricolor no quiere dejarla ir.

Su arribo a los Gunners se dio gracias a que su hermano viajó a Inglaterra, pero poco a poco se ganó un puesto, hasta ser considerada una jugadora importante para la institución.

“Nací en Canadá y viví allá toda mi vida. A los 14 años nos fuimos a Inglaterra, porque mi hermano Marcelo también juega fútbol y había muchos equipos aquí en Inglaterra que lo querían tener en su equipo. Así que toda la familia se mudó. En los primeros años jugaba en el Ipswich Town, donde mi hermano también pertenecía. Fui a unas pruebas que hizo el Arsenal, les gustó cómo jugué, pero no pude quedarme porque vivíamos muy lejos. Afortunadamente, ahora ya estoy aquí.

“Cuando estaba en Canadá siempre quise jugar con su selección. No sabía cómo era la selección mexicana. La primera vez que fui a la concentración con México estaba lesionada, pero aún así me invitaron para conocer a todos y ver cómo trabajaban. Llegué y fue algo completamente diferente a lo que había vivido en mi vida. Me gusta mucho la forma que tienen de enseñar los profes y las jugadoras son ahora como mis hermanas. Me encanta estar con México y no pienso cambiar”.

—  Silvana Flores, jugadora de la Selección Mexicana

Son su orgullo

Para Rubén Flores, padre de Silvana, Tatiana y Marcelo, es un orgullo verlos enfundados en la casaca de la Selección Mexicana, pues siempre soñó con que representaran a su país.

Incluso, aunque respeta su decisión, espera que no cambien de camiseta, ya que anhela que compitan en una Copa del Mundo.

“El mayor orgullo que yo tengo es que mis hijas han tenido una formación en el deporte. Sobre todo, porque han cambiado de país, pero lo más importante es que han crecido como seres humanos. En un principio venimos acá, porque Silvana quería estudiar en escuelas de prestigio. Ahora, el fútbol ha sido un plus para todos”.

—  Rubén Flores, padre de Silvana y Tatiana