La historia de la lucha libre mexicana tiene en sus vitrinas grandes anécdotas, que hoy la hacen única y exitosa en el mundo. Hay personajes legendarios que han posicionado el estilo azteca en lo más alto y, sin duda, uno de esos culpables es Atlantis, quien a lo largo de 35 años ha formado un legado que pocos pueden presumir.
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Sin embargo, está bien dicho que el tiempo cobra factura y aunque el ídolo de los niños aún no piensa en el retiro, el cambio generacional ha llegado, y con ello la inclusión de un nuevo esteta en la familia de la Atlántida, el nacimiento de Atlantis Jr.
El primer contacto con los cuadriláteros fue uno de los momentos más importantes en la vida del Jr., así como ver en primera fila las más grandes batallas de su padre.
Sin embargo, si hay algo que el hijo de la leyenda no olvida es la amabilidad y cariño que su papá le tiene a los aficionados.
“La lucha libre es mi pasión, crecí con este deporte, mi ídolo es mi padre, él es mi ejemplo a seguir. Es mi coach, mi guía y si quiero ser grande en la lucha libre debo seguir sus pasos y consejos. A los 12 años mi padre me llevó al ring de la Arena México, de ahí me enamoré. Seguí entrenando, preparándome, llegué a entrenar fútbol, pero no.
“Cuando la gente gritaba el nombre de mi padre, le pedía una foto o un autógrafo, para un hijo es muy satisfactorio. En algún momento de mi vida dije: ‘Si me pongo las pilas y le echo ganas a este deporte, puedo ser igual o mejor que mi padre’”.
— Atlantis Jr., luchador profesional
Su debut como profesional fue un tanto sui generis, ya que se dio en Japón, un país donde Atlantis tiene un lugar especial en el corazón de los aficionados y en donde ganó mucha experiencia, que lo catapultó a los planos estelares. El momento de subirse al ring, y tener sus primeros minutos, lo describió como inolvidable y reveló algunas de las palabras que su papá le dio minutos antes.
“Cuando se dio la noticia de que Atlantis Jr. sería parte de Fantásticamania 2019 entré en shock, no me la creía, pero también me motivé al doble, porque tener la oportunidad de debutar en Japón fue algo único. Estoy agradecido con las dos empresas, New Japan Wrestling y el Consejo Mundial de Lucha Libre, gracias a esa oportunidad pude madurar como persona y, sobre todo, como luchador. No pensaba en nada, estaba súper nervioso.
“Mi padre me hablaba, pero yo estaba bloqueado por los nervios. Era la primera vez que pisaba un ring, era mi primera lucha como profesional en Japón. Cuando acabó la lucha mi padre me felicitó, porque creo que hice un gran papel en mi debut”.
— Atlantis Jr., luchador profesional
El reto de portar un nombre tan histórico no es algo que asuste del todo al Jr. Incluso, sus objetivos están claros y lo que más desea el esteta es superar los logros de su padre.
“Estoy consciente del nombre que tengo, pero por ello me preparo al doble. No hay día al que no vaya al gimnasio, me exijo al 200%. Si quiero brillar en la lucha libre hay que respetar el nombre que tengo porque no es cualquiera. Poco a poco espero tener más experiencia. Mi principal meta es superar a mi padre. Pero para ello hay que respetar mucho al deporte, como me lo ha dicho mi papa. No hay que dejar de entrenar pesas, ni ring y es lo que estoy haciendo”.
— Atlantis Jr., luchador profesional
