Lewis Hamilton se ha convertido en uno de los pilotos más dominantes en la historia de la Fórmula 1.
PUBLICIDAD
En 2020, el volante británico igualó la marca de Michael Schumacher, al sumar su séptimo título del Gran Circo.
Este año no ha sido sencillo para Lewis, luego de que Red Bull Racing armó una de las duplas más competitivas del serial, con Max Verstappen y el mexicano Sergio Pérez.
Esto ha relevado a Hamilton en la competencia. De hecho, ahora se encuentra en el segundo lugar de la tabla general del campeonato, peleando codo a codo con el piloto neerlandés.
Parte de todo el éxito cosechado por Lewis se debe a una mujer: Angela Cullen, quien por años ha sido su entrenadora personal.
En 2016, cuando el inglés buscaba su cuarto trofeo de F1, Angela llegó a su vida para convertirse en parte de su staff.
La misión no era sencilla, pues se había convertido en la coach de uno de los pilotos más competitivos del serial.
PUBLICIDAD
Además, llegó a cubrir la vacante que dejó Aki Hintsa, un médico finlandés que trabajó con Lewis desde sus inicios.
El reto era grande por cualquier lugar, pero la neozelandesa no le rehuyó en lo absoluto y se puso a trabajar con la intención de prepararlo para ser el mejor.
Hintsa fue un maestro para Cullen, ya que le aportó mucha de la filosofía que hoy ejecuta la fisioterapeuta.
“El modelo de bienestar y filosofía de Hintsa, que entiende que ‘el desempeño es un subproducto del bienestar’, resonó en mí y reflejó mis creencias e ideales de comprensión del desempeño humano. Fue entonces cuando decidí incorporarme como fisioterapeuta y entrenadora de rendimiento en Hintsa Performance.
“La mayor sorpresa es el hecho de que trabajo en el automovilismo -admitió-. Históricamente, los pilotos han tenido entrenadores de fuerza masculinos y creo que yo fui la primera fisioterapeuta y definitivamente la primera mujer en participar”.
— Angela Cullen, entrenadora personal de Hamilton
Además, la neozelandesa se convirtió en la primera mujer que trabajó con un piloto de Fórmula 1, pues solía ser un deporte dominado por los hombres.
Angela modificó la rutina del volante británico, empezando por hábitos de comida, quien tomó la decisión de hacerse vegano en 2017.
Además, lo impulsó a tener una estabilidad física y mental, trabajando en su temperamento, dejando toda la frustración en el paddock y siendo un hombre diferente fuera de las pistas.
Lejos quedó el Hamilton polémico y fiestero, que solía aparecer en diversos centros nocturnos, pese a ser un atleta de alto rendimiento.
Su relación ha traspasado fronteras, ya que ambos se respetan e idolatran, pues han formado una de las duplas más importantes del deporte mundial.
“La intensidad de los deportes de motor en términos de carga, tanto mental como física, para los pilotos durante un fin de semana de carrera y durante una temporada es mucho mayor de lo que había experimentado en cualquier otra disciplina.
“En los ejercicios olímpicos durante una temporada se puede alcanzar el punto máximo una o dos veces para eventos clave, pero la F1 requiere el máximo rendimiento... ¡21 veces al año! Es increíblemente exigente. Los compromisos de viaje, junto con un aluvión de demandas de los medios, agregan más carga a las obvias demandas físicas y mentales del cuerpo al conducir a velocidades tan altas”.
— Angela Cullen, entrenadora personal de Hamilton